jueves, 13 de junio de 2013

Estado Emocional

Pues el tiempo pasa y ya son 6 meses desde que estoy por aquí.

Quitando un viaje relámpago a Venezuela, tengo 6 meses aquí en panamá. Realmente no me puedo quejar.

He de ser honesto, el cambio ha sido bueno para mí. He recuperado bastante de la paz que me hacía falta y creo (y pongo bastante énfasis) que mi esposa está bastante más feliz, ahora que no la están tratando de robar todo el tiempo.

Debo serles honesto y franco, despegarse de tu país y volver a empezar es alto realmente complejo, pero la verdad es que he estado haciendo trampa: Nuestra familia ha venido un par de veces, y con ellos, ha venido un buen "contrabando" de antojos que no podemos dejar de necesitar. Siempre me pareció curioso cuando una vez un amigo que iba a visitar me dijo "Trae Pirulines!". La próxima vez que lo vea lloraremos juntos por la falta del Pirulin en el extranjero.

Ahora, quitando el aspecto "culinario", quería comentarles algunas cosas que he aprendido:

1. NO IMPORTA DONDE ESTES, TODOS LOS VENEZOLANOS TIENEN UN CUENTO DISTINTO DE SU LLEGADA. Así como yo les comenté acerca de mis experiencias con la limpieza del hogar (debo decirles que al final me llegó un embarque de coletos y dí por finalizada mi lucha contra la mopa), cada historia es distinta. Sería injusto explicar cualquier historia por separado, pero lo que si he visto es una gran variedad de situaciones que me hacen pensar que el venezolano es aventurero por naturaleza.

2. EXISTEN PERSONAS A LAS QUE LOS EXTRANJEROS NO LES GUSTAN. Aunque les parezca extraño (sobre todo si han viajado únicamente por placer), a muchas personas no les gustan los extranjeros, y más aún, te colocan por debajo de la persona local. Dado que en mi país y mi contexto social siempre hemos sido muy cordiales con las personas, este comportamiento me ha parecido de lo más curioso.

3. TENEMOS ACENTO! Como lo oyen… Siempre me pareció curioso que el acento neutro de las novelas y programas internacionales se pareciera tanto al acento venezolano, pero la realidad es que eso es un mito tan grande  como cualquier otro. Tenemos un acento característico (más allá de los acentos propios de cada región) que nos distingue como venezolanos.

4. LA MALICIA SE VA DESAPARECIENDO. El venezolano, por su educación en tiempos relativamente violentos, llega a un país muy desconfiado de la gente, lo que hace que sea muy difícil conocer a cualquier persona. La verdad es que con el tiempo, al estar en un país menos violento, el contexto cultural hace que bajes las defensas (un poco al menos). Eso genera un choque cultural inmenso (sobre todo a uno que está acostumbrado a no confiar en nadie). Recuerdo que un amigo que vive en europa me comentó justamente de eso, tengo que recordar decirle que tenía mucha razón.

5. LO BIEN QUE TE VA A IR DEPENDE DE LA BUENA ACTITUD QUE TENGAS. Conozco grandes personas que se fueron basadas en el contexto político de mi país, conozco otras que se fueron simplemente por la oportunidad, conozco personas que no se querían ir pero tuvieron que hacerlo. La verdad es que no importa la razón por las que emigras de tu país, lo que importa es con qué actitud llegas a tu nuevo "hogar"

Finalmente, les comento que tengo la fuerte convicción de cerrar el punto de la migración con este post. Siempre estoy abierto a conversar y ayudar a todo aquel que quiera saber sobre lo que significa irse de su país de origen. Indudablemente comentaré alguna que otra cosa en mis próximos escritos, pero la realidad es que el tema ya es agua debajo del puente (por los momentos).